Después de unos días sin compartir con vosotros... Regreso con las pilas cargadas!! Y qué mejor tema para ofreceros hoy que "Resfriado vs Gripe". Ahora que se nota el descenso de temperaturas y el invierno se aproxima, éstos vienen acompañados de estornudos, fiebre, moqueo, tos,...
Aunque cuando hablamos no distinguimos, por norma general, entre resfriado y gripe; o si se hace, solemos referirnos como resfriados a los casos menos graves y como gripe, a los más latosos. En cierto modo puede decirse que es así, pero vamos a dar datos fundados para diferenciar ambos episodios.
RESFRIADO: Es un período de malestar general por un descenso de las defensas de nuestro organismo. Se manifiesta con dolor de cabeza, cansancio, estornudos,... pero ¡nunca! con fiebre.
GRIPE: Es una infección del virus que causa la gripe. Se hace notar por estornudos, tos, congestión nasal,... (no tienen porque mostrarse todos los síntomas) y ¡siempre! hay fiebre (como en todas las infecciones)
¿CÓMO TRATAR UNO Y OTRO?
Ambos son autolimitantes, es decir, al cabo de unos días (una semana aproximadamente) se pasarán. Es beneficioso el reposo, pero bien es sabido que la rutina diaria puede que no nos lo permita y necesitemos ayuda:
- Existen "remedios caseros" que pasan de boca en boca y son tremendamente populares. Son un buen principio e incluso suficientes en los casos más leves.
- Si no fueran suficientes, podemos acercarnos a la farmacia de turno y que nuestro farmacéutico de confianza nos de algún medicamento de consejo farmacéutico. Os diría que no fueseis con una idea preconcebida de un medicamento porque igual el que pensáis no es el más apropiado en vuestro caso. Por ejemplo, el Frenadol es bueno, pero no milagroso (no ayuda a eliminar la congestión nasal) Expliquen síntomas y dolencias al profesional sanitario y éste os indicará el mejor en cada caso.
- Con la bajada de defensas, o en personas afectadas por otras enfermedades, es posible y muy probable que se dé alguna infección al mismo tiempo. Lo más común son infecciones de garganta (las placas), entre otras. En este caso, lo mejor es acudir al médico de familia para que nos diagnostique y recete, si es necesario, algún antibiótico. ¡Nunca se automedique con antibióticos, ni se los pida al farmacéutico, es necesario que lo recete un médico!
FALSO MITO: No es cierto que los antibióticos curen las gripes y mucho menos los resfriados. Como he dicho el resfriado es un simple malestar y la gripe es una infección por un virus (no por una bacteria) Los antibióticos sólo son eficaces en infecciones por bacterias y son específicos; de ahí que sea necesario el diagnóstico y receta de un médico.
Espero que os haya sido de utilidad la farmainformación en este frío otoño. ¡Hasta pronto!
